Es curioso… Así comienza un hilo que se ha hecho viral en redes sociales del neuropsicólogo Álvaro Bilbao. En él habla de cómo está siendo el comportamiento de los niños durante estos días de confinamiento. Para que entendamos el tono del hilo, recogemos un fragmento:
Es curioso que mientras algunos adultos se saltan la cuarentena para tomar el aire o hacer jogging los niños, que necesitan mucho más el movimiento, no se hayan escapado de casa a saltar, correr o tomar el parque con sus juegos y algarabías.
El neuropsicólogo resaltaba así la capacidad de adaptación que tienen los niños. Lo respetuosos, pacientes y solidarios que son, más que los propios adultos.
Pero no es lo único a lo que nos ganan los niños. Pensemos en la creatividad. ¿Quién crees que es más creativo? ¿Tus hijos o tú?
En un evento Gestionando hijos, Álvaro Bilbao ofreció una ponencia en la que nos habló de de la importancia de la creatividad, su relación con la inteligencia y cuáles son las claves para fomentarla en nuestros hijos. Aquí os la dejamos.
La creatividad y su relación con la inteligencia
La creatividad tiene mucho que ver con la inteligencia, afirma Álvaro, pues “si buscamos la definición de inteligencia no vamos a encontrar que la persona inteligente es aquella que acumula muchos conocimientos o habilidades, sino que es la persona capaz de resolver problemas de una manera creativa: ser capaces de resolver con éxito problemas nuevos o de dar una vuelta de tuerca a esos problemas viejos para resolverlos de una manera más eficiente o satisfactoria”.
Por eso, señala Álvaro, no solo los niños sino también los adultos necesitan “desarrollar ese lado creativo, porque los niños nos suponen un montón de desafíos, plantean todo tipo de situaciones que nosotros, como adultos, no hemos afrontado anteriormente porque nos estamos estrenando como padres”.
Claves para fomentar la creatividad de nuestros hijos
- El juego, herramienta fundamental para entrenar la creatividad
Durante su intervención, Álvaro Bilbao nos propone juegos que “ayuden a educar a vuestros hijos en la creatividad y a creer en el poder de la creatividad y os ayuden en la vida cotidiana para ser más flexibles y creativos a la hora de resolver los problemas cotidianos”.
El primero de esos ejercicios es pensar cosas que podríamos hacer con un ladrillo. Y nos anima a que contemos cuántas ideas nuevas se nos han ocurrido. La mayoría del público confiesa que se les han ocurrido menos de quince ideas. Pero, y si le preguntáramos a un niño, ¿cuántas cosas se les ocurriría hacer con un ladrillo? Haced la prueba y veréis.
2. La creatividad sin persistencia no sirve para nada
Otra de las claves para ejercitar la creatividad es la “persistencia, ser capaz de seguir con una idea hasta darle forma”. Para subrayar la importancia de la persistencia, Álvaro habla de Miguel Ángel, escultor que estuvo “cuatro años con el cincel para poder sacar esa estatua de la roca”. Otro ejemplo de la importancia de la persistencia es Einstein, que “tardó casi 20 años en desarrollar una fórmula que cualquier niño puede copiar en un cuaderno. Como decía el propio Einstein, “si tú crees que tienes problemas de matemáticas, imagínate los que tengo yo”. Álvaro señala por eso que “si tenéis niños creativos, incentivad que se esfuercen, que terminen lo que empiezan, porque sin persistencia la creatividad se queda simplemente en imaginación”.
3. Dejemos que den rienda suelta a sus ideas locas
Otro de los requisitos de la creatividad es “perder el control, ser capaces de liberarnos de ese filtro de censura”, algo que nos ocurre a todas las personas cuando soñamos. “Nuestro cerebro tiene ese potencial creativo y muchas veces tenemos que darle rienda suelta. Hay que aflojar muchas veces con los niños. Si tenemos una casa en la que las normas son muy estrictas, el niño no va a conservar su potencial creativo porque la creatividad se nutre de la libertad, de romper las normas”, afirma Álvaro.
Entre risas, nos cuenta Álvaro que “cuando Newton formuló la teoría de la gravitación universal, ¿qué estaba haciendo? ¿Trabajando en su despacho? ¿Haciendo deberes? ¿Estaba en extraescolares? No, estaba descansando y observaba que la manzana cayó”. Por eso, no duda en afirmar que “los niños, para conservar su creatividad necesitan tiempo libre y sentirse relajados”. Y hablando de un experimento con ratas, nos dice el neuropsicólogo que la creatividad tiene mucho que ver con permitir “investigar y encontrar soluciones”. Las neuronas de las ratas que han podido explorar son más ricas, afirma.
4. La importancia de la actitud de las madres y padres
Además de “dibujar, jugar con piezas de Lego, disfrazarse, contar historias, que los padres tengamos una capacidad creativa para jugar con ellos, reducir el tiempo frente a la TV, darles tiempo para aburrirse y favorecer una vida contemplativa”, lo más importante para favorecer el pensamiento creativo de nuestros hijos es nuestra actitud. Álvaro lo ilustra con un juego muy revelador: propone que se hagan grupos de tres personas. Una de las personas del grupo piensa ideas originales para montar una super fiesta. Los otros dos miembros contestan primero “no, porque”, luego “sí, pero” (y ponen una excusa) y por último “sí, y además”. Con las dos primeras respuestas, la persona que ha dado ideas originales se siente frustrada. Y lo cierto es que cuando la respuesta ha sido “sí, y además”, las personas se han sentido “contentas, apoyadas y felices”. Por eso, no cabe ninguna duda cuando Álvaro pregunta “de las tres fiestas que han resultado, ¿a cuál iríais?”. Todo el público, claro, elige la fiesta en la que las respuestas han sido “sí, y además”.