«Y tú, como madre, como padre, ¿a qué aspiras? La mayoría aspiramos a que nuestros hijos sean fantásticos, a que tengan una actitud maravillosa, a que sean alegres, pro activos, a que luchen, a que sean positivos. agradecidos… Pero, uno tiene que preguntarse: ¿yo, como padre, madre, qué ejemplo estoy dando?» Así comienza el discurso del conferenciante, Victor Küppers, sobre la importancia de la actitud en la educación.
Un discurso que, en estos días de confinamiento, puede servirnos de reflexión, puede recordarnos la importancia de nuestros actos. Porque nuestros hijos e hijas, como dice la experta en inteligencia emocional, Mar Romera, nos aprenden a nosotros. Somos el espejo en el que se miran.
En este vídeo, Victor Küppers nos invita a reflexionar sobre varias cosas:
- «Queremos comunicación, pero cenamos viendo la tele»
¿Cuantas veces no le habrás pedido a tus hijos e hijas que dejen el móvil mientras están en familia y 10 minutos después eras tú quién mandaba un Whatsapp estando con él? Las madres y padres muchas veces somos incongruentes. Queremos conseguir algo de nuestros hijos que ni siquiera nosotros somos capaces de hacer. El ejemplo es la principal herramienta educativa. Nuestros hijos no nos escuchan, nos ven, y nos copian.
2. «Tenemos lo que sembramos»
La educación es un proyecto a largo plazo. Desde que nacen nuestros hijos, nosotros, con nuestros actos, vamos sembrando semillas. Y como dice Víctor Küppers en este vídeo, lo que recojamos será el fruto de lo que hayamos plantado. Seguro que siendo conscientes de esto, seremos más cuidadosos en el proceso.
3. «A veces, todo son problemas»
¿Te has parado a pensar la de veces que los adultos nos quejamos a lo largo del día? Que si el dinero, el jefe, la cola de la pescadería… Y sí, claro que tendremos motivos para hacerlo, pero, como dice Victor Küppers, «si queremos que nuestros hijos sean alegres, optimistas, resilientes frente a las adversidades, ¿qué les estamos inculcando con nuestra actitud? ¿Vamos en la dirección correcta?
Trasladando esta reflexión al momento que estamos viviendo, si queremos que nuestros hijos e hijas lleven de la mejor forma posible esta crisis, este encierro, el primer paso es mirar cómo lo estamos llevando nosotros. Porque, no debemos preocupemos tanto de sus pasos, preocupémonos más de los nuestros. Ellos, simplemente, nos siguen.